Miley firma su libro en Nueva York

La actriz de Hannah Montana presenta sus memorias Miles To Go en la tienda de libros Barnes & Noble en pleno centro de Manhattan, 2b Nueva York.

En el que será seguramente best seller, Miley cuenta su amor por un Príncipe Encantado que luego hemos conocido que es Nick Jonas y su mala experiencia de buling en el colegio.

Además, la cantante rubia afirma que se emocionó con cada cosa que hizo en su última película Bolt.

La artista se confiesa como una persona muy sensible: “No paro de llorar por todo, absolutamente todo. Algunas veces lloro sin control, si estoy verdaderamente triste. Lloré durante Bolt –y sabía lo que iba a suceder–. Si lo recuerdo me pongo a llorar. No puedo dejar de ser yo misma". El libro está ya a la venta en las librerías de Estados Unidos.

Acces Hollywood tiene una version de este libro en el que relata su vida como pre-adolescente en Tennessee.

Miley se refiere a sus intimidadores como el Club Anti-Miley en su libro. En él, recuerda un incidente con sus compañeras en el baño: "las chicas fueron más allá de la simple intimidación. Eran chicas grandes y fuertes", escribió Miley. "Yo era delgada, esquelética y pequeña. Eran capaces de hacerme daño físico". "Me metieron dentro de un empujón. Estaba atrapada. Golpeé fuerte la puerta tanto que me hice daño en los nudillos. Nadie vino. Pasé muy dolida allí como una hora, esperando que alguien me rescate, preguntándome cómo había llegado esa situación a mi vida". La cosa fue a más cuando la retaron a una pelea. La cantante escribe: "Esto era como que la “Operación: entristezca a Miley” llegaba a un nuevo nivel. Más como Operación peguen a Miley. Tres niñas se tiraron encima de mí. Aplastaron mi estómago. Yo agarré con fuerza mi sándwich de queso asado como si fuera la mano de mi mejor amigo. Era casi mi mejor amigo en esos días. Yo estaba deshecha". Miley continúa: "Empezaron a insultarme y me dijeron que me levantara. Me senté ahí, muerta de frío. No supe qué hacer. Al final, no pude más. ¡No soy de piedra! ¿Qué me podían hacer? Estaba rodeada de gente. Me puse de pie, y aunque me sacaban dos cabezas, les dije: "¿Cuál es vuestro problema? ¿Qué os he hecho?". "El director intervino antes de que la pelea continuase, pero no antes de me dieran un puñetazo aludiendo a mi padre, cantante de country, Billy Ray Cyrus". "Las compañeros de clase decían: ‘Tu padre es un genio y tiene éxito. Tú nunca serás tan importante como él’", relató Miley.